Visitar Peratallada (Girona, Costa Brava)

La villa de Peratallada es una de las poblaciones más visitadas de la Costa Brava y de toda la provincia de Girona. Su peculiar ubicación, a lomos de un basamento de roca arenisca, y su entramado de callejuelas medievales, lo convierten en uno de los pueblos más bonitos de Cataluña. En esta pequeña guía os explicamos qué ver en Peratallada, cómo llegar, qué hacer, dónde comer o dormir, etc.

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Breve historia de Peratallada

La presencia de un castillo en Peratallada está documentada en el s. XI, aunque es probable que ya existiera allí una fortaleza muy anterior. En cuanto al nombre, se menciona por primera vez en el siglo X y da buena idea de su significado: Petra Scissa o Petra Taiata (piedra tallada). La baronía de los Peratallada, fortificada en torno al castillo, vivió su máximo apogeo en plena Edad Media, cuando se convirtió en una importante población de paso entre Girona y el condado de Empúries.

En el s. XIII, el linaje de los Peratallada se quedó sin descendencia y se mezcló con la casa de los Cruïlles. De hecho, uno de los personajes históricos más importantes del pueblo es Berenguer de Cruïlles, quien llegaría a ser obispo de Girona y primer presidente de la Generalitat de Catalunya. En nuestros días, Peratallada cuenta con menos de 250 habitantes y su principal motor económico es el turismo. En 2008 fue declarada Bien Nacional de Interés Cultural.

Qué ver en Peratallada

El encanto de Peratallada se reparte por todas y cada una de sus calles. En pocos pueblos hemos visto tal proporción de belleza por metro cuadrado. No hay rincones feos, no hay casas que «sobren», no hay lugar que no parezca diseñado para la foto. Y, pese a todo, no resulta artificial. La única nota negativa, y de esto no tiene culpa el pueblo, es la gran cantidad de turistas que pueden concentrarse en temporada alta o fines de semana. Pero vayamos al grano; hablemos de los principales lugares que ver en Peratallada…

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Una visita clásica podría empezar en la Iglesia de Sant Esteve, un templo románico de dos naves (s.  XII-XIII) que se encuentra justo en las afueras de la villa. Desde allí, hay que cruzar la carretera para toparse con el Portal de la Virgen, donde debió de existir un puente levadizo y donde se ubicaba la imagen sagrada que le da nombre. Antes de entrar al pueblo podéis dar un pequeño rodeo para admirar los restos de las murallas, el foso y la Torre Norte (visible desde el lateral derecho).

El Portal de la Virgen os introducirá en Peratallada por el Carrer de la Roca, donde entenderéis en seguida el porqué del topónimo. En muchos tramos de esta calle la roca viva tiene absoluto protagonismo, dando forma a la estructura de algunas casas y a la propia vía. Después de pasar bajo un arco de piedra, sin dejar el Carrer de la Roca, os encontraréis a mano izquierda la Torre de les Hores y a mano derecha (rodeando por el aparcamiento) la única torre de planta circular.

En el cruce con el Carrer d’en Vas (donde hay un precioso arco), os sugerimos que sigáis por Carrer de Jaume II para ir rodeando el castillo y poder ver mejor su Torre del Homenaje, con más de 10 m de altura y las típicas almenas cuadradas en lo alto. Esta calle desemboca en Carrer del Forn. Tomadla hacia la izquierda para llegar a la Plaça del Castell, donde se encuentran el castillo y la Oficina de turismo.

El castillo-palacio de Peratallada, del que se tiene noticia desde el año 1065, es quizá lo más decepcionante de la visita al pueblo. La fachada principal, al menos, no tiene mucho de particular. Solo algunas ventanas geminadas y sus imponentes dimensiones nos recuerdan el pasado noble de esta construcción, rehabilitada entre 1964 y 1975. Desgraciadamente, se trata de un espacio privado solo disponible para bodas, eventos de empresa y similares.

Desde las cercanías de la Oficina de Turismo hay que pasar bajo otro arco para llegar a la Plaça de les Voltes, uno de los rincones más bonitos que hay que ver en Peratallada. Esta plaza pudo estar completamente porticada en otros tiempos, pero hoy solo se conservan los arcos de la cara norte. Aun así, mantiene un fantástico ambiente medieval y es un buen sitio donde parar a tomar algo.

Para finalizar la visita podéis pasar bajo los porches y salir al Carrer Major, donde encontraréis cafeterías, restaurantes, heladerías, una magnífica «magdalenería», tiendas de ropa y souvenirs, etc. Antes de dar por terminado el paseo, nuestra principal recomendación es que os dejéis llevar por las callejuelas y exploréis a vuestro aire. ¡Hay rincones preciosos por todas partes!

Qué ver cerca de Peratallada

El núcleo urbano de Peratallada pertenece a un conjunto municipal más amplio llamado Forallac, formado por otras seis poblaciones que se encuentran en los alrededores. De ellas, la más destacada es Vulpellac, cuyo casco antiguo también fue declarado Bien Cultural de Interés Nacional por la Generalitat. Llegar hasta allí solo os llevará 8 minutos en coche, y por el camino podéis hacer una visita rápida a la iglesia de Sant Esteve y la necrópolis medieval de Canapost. Y, por supuesto, no dejéis de visitar Pals (a 10 min) y Begur (16 min), dos clásicos imprescindibles de la Costa Brava. Pueblos no tan populares, pero también encantadores, son Monells y Cruïlles, ambos cerca de la Bisbal d’Empordà (a unos 20 min de Peratallada). También os sugerimos que os acerquéis a Figueres (45 km), con su famoso Teatre-Museu Dalí. Bastante más lejos (66 km) se encuentra el monasterio de Sant Pere de Rodes, una visita imprescindible en el Cap de Creus.

Información práctica para visitar Peratallada

Ubicación

• Peratallada, Baix Empordà, Girona, Cataluña (ver mapa al pie)

Cómo llegar a Peratallada

• Coche.
  • Desde Barcelona (122 km, 1 h 20 min). Lo más rápido es conducir por la AP-7 en dirección Girona/Francia, tomar la salida 9A y continuar por la C-35, C-65 y C-66 (pasando Platja D’Aro, Palamós, y Palafrugell) hasta Vulpellac, donde encontraréis las señales para llegar a Peratallada. Si necesitáis coche de alquiler os recomendamos reservar en Booking RentalCars, ya que suelen tener los mejores precios.
  • Desde Girona (40 km, 45 min). Hay que dar un pequeño rodeo por el norte. Primero se sale por la N-II hacia Francia, luego se toma el desvío de la C-66 (Banyoles/Palamós). Podéis seguir esta carretera hasta la Bisbal d’Empordà y Vulpellac (donde encontraréis el desvío a Peratallada) o recortar un poco tomando la GI-642 (hacia Pals), la GI-644 (hacia la Bisbal) y la GI-651 (hacia Peratallada).
  • Aparcamiento. Hay tres parkings (todos de pago). Nosotros os recomendamos que vayáis al municipal (ubicado en el mapa de más abajo), donde no se cobra tarifa fija (sino por horas) y se puede pagar con tarjeta. Además, hay franjas horarias gratuitas.
• Bus. La empresa Sarfa cubre las rutas entre Girona y Peratallada, además de otras poblaciones cercanas. Hasta donde sabemos, no hay conexiones directas desde Barcelona a Peratallada, lo que obliga siempre a tomar dos buses (vía Begur, la Bisbal d’Empordà o Girona, por ejemplo).
• Tren. No hay estación de tren en Peratallada ni en los pueblos más cercanos, por lo que cualquier ruta en tren implicaría una posterior conexión en bus (hay estación de tren en Girona, Flaçà o Celrà).
• Tours. Algunas empresas ofrecen tours con transporte desde Barcelona o Girona a diferentes pueblos medievales de la Costa Brava. Aquí podéis ver un tour desde Girona con visita a Pals, Peratallada, Begur, etc.
• Avión. El principal aeropuerto en la provincia es Girona – Costa Brava (a 51 km).

Webs oficiales de turismo en Peratallada

• Visit Peratallada: www.visitperatallada.cat

Dónde dormir en Peratallada

• En nuestra última visita a la zona nos alojamos en Les Roques (a 40 km), un pequeño hotel con piscina y servicio de restaurante. Queda algo alejado de Peratallada, pero a nosotros nos vino de lujo para descubrir otras zonas de la provincia, como las ruinas de Empúries o el monasterio de Sant Pere de Rodes. Ideal con niños.
• Peratallada es un pueblo pequeño, pero tiene bastantes alternativas de alojamiento. Aquí podéis ver un completo listado de hoteles, hostales, casas rurales y demás.
• Si no queréis pensar demasiado, el alojamiento más popular en Pals es Hostal Blau, con una media de 9,2 en Booking y más de 600 comentarios.

• Si no encontráis lo que buscáis os sugerimos que le deis una oportunidad a este buscador, una alternativa a Booking que a nosotros nos encanta.

Dónde comer en Peratallada

• Los restaurantes de Peratallada se concentran en la Plaça de les Voltes, el Carrer Major y el Carrer del Forn. Uno de los restaurantes mejor valorados de todo el pueblo es L’Eixida, aunque no es precisamente económico (45€ menú).
• Tres restaurantes de Peratallada un poco más asequibles serían La Roca, Candelaria Tapes o Cala Nena, también con excelentes valoraciones. Si buscáis algo aún más económico, una buena opción podría ser La Cort (20€ menú).

Mapa de Peratallada

Ampliar mapa de Peratallada

Fotos: (1) Torre Oeste (2 y 6) Torre del Homenaje (3) Iglesia de Sant Esteve (4) Portal de la Virgen (5 y 9) Carrer de la Roca (7) Fachada principal del castillo de Peratallada (8) Plaça de les Voltes. Autoría: Lupe/Los apuntes del viajero.

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