Guía para visitar el Valle de Tena (Huesca)

En el Pirineo aragonés se esconden algunos de los valles más impresionantes de toda la geografía española. Los más conocidos por el gran público son los de Ordesa y Monte Perdido, pero lo cierto es que hay otros muchos que podrían competir en belleza con estos. Uno de ellos es el valle de Tena, donde se ubican localidades tan populares como Biescas o Panticosa. En este artículo os dejamos una selección de cosas que hacer y de lugares que ver en el valle de Tena, además de algunas informaciones prácticas.

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Qué hacer en el valle de Tena

El valle de Tena se ubica en la comarca del Alto Gállego (Huesca) y se extiende, más o menos, desde Sabiñánigo hasta la frontera francesa en el Portalet (41 km). Su morfología está marcada por el cauce del río Gállego, que lo atraviesa de norte a sur en su camino hacia el Ebro. La principal carretera, que discurre paralela al río, es la A-136. Desde esta se puede acceder a la mayoría de lugares que mencionaremos.

1. Calentar motores en Biescas

No es que Biescas sea la localidad más bonita del valle, pero es su puerta de entrada y es casi obligatorio hacer allí una parada. Merece la pena dar un paseo por el pueblo, dividido en dos por el río, y realizar alguna caminata hasta sus dólmenes neolíticos, sus búnkeres o hasta la ermita de Santa Elena. Además, en las inmediaciones podéis disfrutar en familia del Biescas Aventura, con tirolinas y otras diversiones. Y al ser una población relativamente grande también os puede servir como base para conocer el valle.

2. Ver animales en Lacuniacha

Somos muy cautelosos a la hora de recomendar actividades en las que se exhiban animales, pero el Parque Faunístico Lacuniacha es uno de esos sitios donde existe un verdadero compromiso con la fauna. Lacuniacha quizá no es tan espectacular como los clásicos zoos, pero su propio emplazamiento (en las laderas de una montaña) ya nos da una idea de la importancia que se le da a los hábitats de los animales, en su mayoría de especies amenazadas (lince boreal, oso pardo, bisonte europeo…).

Precisamente por ubicarse en un entorno natural y por ofrecer tanto espacio a los animales, hay que prepararse para una buena caminata (sencilla, pero pedregosa en algunos tramos, con subidas y bajadas, etc.). Si vais a visitar Lacuniacha con niños tened en cuenta que el recorrido se realiza por senderos no asfaltados (no aptos para carritos). Se recomienda hacer la visita siguiendo el itinerario señalizado, lo cual os llevará unas 2:30 h e incluso 3 h (4,5 km). Llevad calzado y ropa adecuada, además de comida y agua.

3. Visitar Sallent de Gállego y su cascada

Sallent de Gállego es uno de los pueblos más bonitos del valle de Tena. En invierno podéis alojaros allí si queréis esquiar en la estación de Formigal. Fuera de temporada, la calma del pueblo invita a dar un paseo por su precioso casco urbano y por la orilla del río Aguas Limpias. No hay que perderse el puente medieval y su iglesia del siglo XVI. Y si queréis hacer una ruta bastante sencilla, pero muy bonita, acercaos a la piscina municipal para iniciar allí la caminata hasta el precioso Salto de Sallent (2,4 km ida y vuelta).

4. Disfrutar de los embalses de Lanuza y Búbal

En el valle os encontraréis con dos embalses: el de Búbal y el de Lanuza. En ambos podéis disfrutar de un buen número de deportes náuticos, como el kayak, el paddle surf o el piragüismo. Si os va la marcha, en Hoz de Jaca ofrecen dos actividades muy famosas: la tirolina del valle de Tena (1 km de longitud, a 120 m de altura) y el columpio del valle de Tena, ubicado a 150 m el sobre el embalse de Búbal. Estos dos pantanos también se prestan a hacer senderismo… ¡y no os perdáis las vistas desde la presa de Lanuza!

5. Montar en el tren del valle de Tena

Aunque en el valle hay 3 trenes turísticos, solo uno de ellos es conocido como el tren del valle de Tena. Tanto si vais a visitar el valle de Tena con niños como si sois un grupo de adultos, esta es una actividad que os recomendamos encarecidamente. El tren tiene su punto de partida en Piedrafita de Jaca y os llevará a conocer los preciosos parajes de La Partacua. La duración del viaje es de aproximadamente 2:15 min (ida y vuelta) y normalmente se hace una breve parada en el idílico ibón de Piedrafita.

6. Cruzar las pasarelas de Panticosa

Otra de las cosas que hay que hacer en el valle de Tena es visitar Panticosa. La localidad no destaca por su belleza (más allá de su espectacular entorno), pero es el mayor centro turístico del valle por cantidad de hoteles, restaurantes, servicios, etc. El famoso balneario de Panticosa (a 7,5 km del núcleo urbano) y la estación de esquí son sus dos grandes reclamos, pero aquí queremos destacar las pasarelas de Panticosa. Inauguradas en 2021, estas pasarelas se alzan entre riscos a 25 m de altura sobre el río Caldarés.

Aunque el tramo de pasarelas es relativamente corto (800 m), la experiencia merece mucho la pena. El desfiladero en el que se adentran es impresionante y la ruta completa (2,2 km / 1 hora) os permitirá pasar por el estupendo mirador O Calvé, desde donde se obtienen unas inmejorables panorámicas de Panticosa. Para visitar las pasarelas hay que recorrer forzosamente este camino de sentido único, con desnivel acumulado de 160 m, siempre por senderos de montaña. Conviene llevar agua y calzado adecuado.

7. Subir en el tren de Panticosa (el Sarrio)

Otra buena excusa para ir a Panticosa es montar en su tren turístico, conocido como «el Sarrio«. Así como el tren del valle de Tena ofrece un itinerario de ida y vuelta, el tren de Panticosa se suele utilizar para acceder al valle de la Ripera e iniciar allí alguna de las 6 rutas de senderismo propuestas. Estas rutas, bien señalizadas, tienen diferentes longitudes y niveles de dificultad (consultad este documento). El trayecto de vuelta es opcional y muchas personas optan por regresar a pie (6 km, 2 h).

El tercer tren turístico del valle es el tren de Tramacastilla. Nosotros no tuvimos oportunidad de probarlo, ya que su temporada de actividad es más corta. Este propone un itinerario de ida o de ida y vuelta desde Tramacastilla hasta el ibón de las Paules.

8. Explorar las rutas del valle de Tena

De todas las cosas que hay que hacer en el valle de Tena, nos hemos dejado para el final la más importante: ¡caminar! En estos espectaculares parajes naturales encontraréis decenas de senderos señalizados. Podéis encontrar información sobre las rutas en el valle de Tena en la web oficial del valle (hay 22) o en Wikiloc (más de 40). En el valle de la Ripera, del que acabamos de hablar, tenéis 3 o 4 rutas familiares, como la de la cascada de Tendenera y la de regreso a Panticosa, o algunas más exigentes como la del ibón de Catieras.

En Sallent de Gállego tenéis también muchas alternativas. Ya comentamos la sencilla ruta hasta la cascada de Sallent, pero también hay algunas más exigentes como la del pico Musales o la del ibón Respomuso. Otras rutas fáciles en el valle de Tena (o bastante asequibles en general) son las de la cascada del Saldo (en Escarrilla), la del bosque Betato (en las cercanías de Tramacastilla) o la del ibón de Espelunciecha (cerca del Portalet).

Alojamiento en el valle de Tena

En esta ocasión viajábamos en autocaravana, así que nuestra experiencia personal se limita al camping Escarra (en Escarrilla), que es modesto, pero agradable. De todos modos, aquí os dejamos una lista de alojamientos en el valle de Tena de los que tenemos buenas referencias:

• Hotel Continental Balneario de Panticosa: como dijimos, un clásico del valle. Aunque su nota media en Booking no es de las más altas, tiene más de 4500 reseñas. Todo un resort destinado al placer, con spa termal, piscina, varios restaurantes, etc.
• Tierra de Biescas: hotel 4* con 8,7 de media. Cuenta con piscina exterior y spa.
• Hotel Viñas de Lárrede: precioso hotel boutique en la zona sur (9,3 de valoración)
• Apartamentos Formigal: apartamentos bien equipados y con precios razonables
• Camping Valle De Tena: camping municipal con buenas instalaciones y disponibilidad de bungalows o habitaciones.

• Si no encontráis lo que buscáis os sugerimos que le deis una oportunidad a este buscador, una alternativa a Booking que a nosotros nos encanta.

Restaurantes en el valle de Tena

Algunos sitios donde nosotros comimos muy bien fueron:

• Restaurante 5mentarios (Biescas): económico, platos contundentes, migas muy buenas
• Camping Escarra (Escarrilla): se come muy bien en el restaurante (y barato)
• Hostal Centro (Panticosa): sencillo, con platos caseros y trato familiar
• Bar Casino (Sallent de Gállego): terraza agradable, ideal para tapear

Qué ver cerca del valle de Tena

Aquí van algunas sugerencias de lugares que podéis visitar en los alrededores del valle de Tena. Para las distancias hemos tomado Biescas como referencia.

• Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido (28 km)
• Jaca (29 km)
• Estación de Canfranc (51 km)
• Aínsa (67 km)
• Huesca (68 km)
• Valles de Hecho y Ansó (71 km)
• Castillo de Loarre (94 km)

Cómo llegar al valle de Tena

• Transporte público: podéis llegar al valle de Tena con el servicio de bus de la empresa Avanza, que tiene líneas regulares desde Huesca o Zaragoza. Estos buses paran en casi todas las localidades del valle, incluyendo Sabiñánigo, Biescas, Panticosa, Sallent de Gállego, etc. No hay estaciones de tren en la zona, por lo que si viajáis desde Madrid, Barcelona y otras ciudades más alejadas, primero tendréis que tomar un tren hasta Huesca, que dispone de estación de alta velocidad, y luego continuar en bus. Para moveros por el valle de Tena podéis usar las mismas líneas de bus de Avanza.
• Vehículo propio: salvo que lleguéis desde Francia o desde Ordesa, para acceder al valle de Tena tenéis que tomar como referencia Sabiñánigo. Desde esta localidad parte la N-260a, que tendréis que seguir hasta Biescas. A partir de allí no hay pérdida, ya que la A-136 es la única carretera que recorre el valle (de sur a norte en este caso). Para llegar hasta Sabiñánigo desde el oeste (Pamplona) tomad la A-21, pasando por Jaca. Para llegar desde el sur (Zargoza, etc.) seguid siempre la A-23. Por último, para llegar desde el este (Lleida, Barcelona, etc.), tomad la A-2 hasta Lleida, continuad por la A-22 hasta Huesca y recorred el último tramo de la A-23 hasta la propia Sabiñánigo.

Mapa del valle de Tena

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Fotos: todas las imágenes son originales de Los apuntes del viajero, salvo que se indique lo contrario en la leyenda.

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